viernes, 19 de junio de 2009

EN LA SOMBRA DE SAN MARTÍN

Fotos: Gladys Manrique
Por: Jesús Ernesto Heredia Velafile://En%20la%20sombra%20de%20San%20Martín/


La historia del Perú nos refiere que el general don José de San Martín, cuando descansaba en la bahía de Paracas, al norte de Ica y al sur de Lima, vio por primera vez las pariguanas o flamencos, aves de la familia de las zancudas, cuyo color rojo y blanco lo impulsaron a dar vida a la bandera nacional, si bien la figura de la bicolor cambio, hasta hoy se respetan los colores de nuestro emblema símbolo patrio que nos dejó el libertador.

No es sin embargo los sueños de libertad del general argentino, ni los colores de nuestra bandera nacional que me inspiran a escribir este artículo, sino la abandonada zona de las playas de Pisco muy cerca de la bahía de Paracas, donde aún es nido de aves de las familias palmípedas, zancudas, guaneras y de carroña.

Me alegró más el día que estuve con mis compañeros de la universidad, porque en realidad en ningún momento lo pensé, cuando junto a otros tres maestristas pudimos apreciar un par de flamencos volando por esta desierta playa de arena, charcos y greda, cruzando el aíre con sus alas extendidas pudimos apreciar esos colores hermosos que dieron origen a las banderas que ahora flamean en los techos de nuestras casas cada 28 de julio.

Me llamó la atención que en esta zona donde hay tanto por hacer las autoridades de la zona no tengan ni siquiera un plan de recuperación del lugar, tomando en cuenta que es un centro de anidación de varias especies de aves y de variedad peces dentro del mar.

La extensión territorial es inmensa, se aprecia que en época de verano o de Semana Santa, suele ser un centro de acampamiento, las huellas dejadas en la arena por los fierros de las tiendas de campaña, así lo indican. Más aún si nos ponemos a recoger los envases plásticos de gaseosas, los platos, vasos y cubiertos descartables, las botellas de vidrio y un sin número de desperdicios reciclables que son abandonados por los ocasionales visitantes del lugar.

Ir en el mes de junio a este lugar es curioso, uno puede caminar todo el litoral sin encontrar a otra persona, sólo a la distancia se pueden apreciar las viviendas en la carretera y los pescadores del muelle de la caleta de San Andrés. Porque hasta los botes de los pescadores están lejos y solitarios, no se si es por la hora o si es por que es una temporada de baja pesca.

Quizás esto último me lo pueda haber confirmado los restos de un delfín abandonado en la orilla de la playa, que había sido recientemente desollado después de haber lo baleado con un proyectil de escopeta de caza, la falta de peces muchas veces hace que los pescadores recurran a la caza de este cetáceo para poder llevar algo de dinero a su hogar. Lo lamentable es que se contribuye a la extinción de un animal inteligente y hermoso, más triste fue para nosotros cuando apreciamos a su pareja que nadaba cerca de la orilla esperando el regreso del animal ya muerto.


Estamos seguros que realizar un proyecto para convertir la zona en un centro de investigación serviría de mucho para explicar la migración de las aves vistas en el lugar, así como de los peces que habitan las aguas calientes de esta zona del litoral peruano.

Para ello es necesario dar los indicadores, que puedo resumir en los siguientes:

Indicadores de Presión:
- Presencia de pobladores en la zona.
- Pescadores artesanales.
- Residuos dejados por los visitantes.
- Playa abandonada.
- Agricultura incipiente.
- Mar contaminado

Indicadores de estado:
- Arena contaminada por residuos de conchas y basura.
- Lagunas sedimentadas.
- Los microorganismos e insectos de la zona.
- Las aves.
- Los peces
- Puente destruido por movimiento sísmico
- La turbidez del mar.

Indicadores de Respuesta:
- Normas legales.
- Población.
- Política de gestión ambiental.
- Ordenanzas municipales.
- Política agraria.
- Construcción de vías de acceso.


Para realizar nuestro proyecto tendríamos que analizar la viabilidad de la interdisciplina en la búsqueda de la integración del ecosistema, para describir los aspectos analíticos científicos que nos permitan elaborar un piloto de centro de investigación.

Como propuestas podríamos mencionar que se debería construir vías de acceso de transporte y peatonal, definir la zona de la playa y la de agricultura, dejar de usar municiones para la pesca y que esta, de forma artesanal, se realice a una milla de distancia; que el muelle se convierta en un centro turístico. Limpiar las arenas de la playa, para erradicar lo residuos de conchas y desperdicios; y permitir el ingreso de visitantes sólo para casos de estudio, investigación, turística o campamento vigilada.



De esta manera podríamos convertir la zona en un centro recreacional de investigación que revierta en la economía de la población cambiada hoy a cantantes inusuales, tras el sismo de agosto del 2007, para que de una u otra manera, con el cambo de actividad económica no se vea perjudicada la economía de sus hogares y muy por el contrario signifique una mejora de ello.

En el restaurante que almorzamos antes de terminar la visita a esa hermosa bahía abandonada, escuchabamos la voz pregonera de un pescador sin trabajo, gurgutando de su gargante la canción "El Plebeyo", ese vals cuya letra sólo la pudo escribir alguien como Felipe Pinglo Alva; "La noche cubre yaaaa con su negro crespón/ de la ciudad las calles que cruzan las gentes con pausada acción...", es una pena que tanta gente esté tratando de ganar algo de dinero con acciones artísticas de verdad muy pobre, que de forma fácil podrían contribuir en un proyecto de investigación de esa bahia rica en biodiversidad, el reto está dado, nos corresponde ahora concretarlo para bien de todos.

jueves, 18 de junio de 2009

NO EL HABLADOR SINO EL CHILLÓN

Por Jesús Ernesto Heredia Vela Foto: Gladys Manrique
http://No el Hablador sino el Chillón el Hablador sino el Chillón
Esta es una breve crónica de una impresión personal del río Chillón, cuyas aguas recorren las provincias de Canta, Lima y el Callao dentro del departamento de Lima. Como decimos no se trata del río hablador, que como todos sabemos es el Rimac, y es el río emblemático de la ciudad, porque cruza por el centro de la capital.

Aunque hasta mediados del siglo XX existían más ríos en la misma ciudad, como el “Huatica”, desaparecido por el crecimiento de la urbe, éste recorría el ahora jirón Andahuaylas en Barrios Altos. Y hasta mediados de los años setenta todavía se podía apreciar como un canal de riego, que cruzaba Surco y Chorrillos, el también desaparecido río Surco.

Eran cuatro ríos que cruzaban la ciudad de Lima, pero en este siglo XXI ya sólo tenemos dos, más uno que cruza a las postrimerías de la capital que es el río Lurin.

Pero nuestra visita se hizo a la margen izquierda de la cuenca del río Chillón en el Callao, cuyos origines del agua nace en la Cordillera “La Viuda”, no sabemos si el nombre de la Cordillera halla incidido en el río, pero coincidencias peculiares se pueden dar como en este caso.

Como todo bien público el río Chillón es uno de los bienes públicos de Lima y el Callao, en este caso la parte visitada corresponde al Callao. Donde no hay exclusión pero si realidades, con limitaciones en sus usos como las ondas electromagnéticas.

Este río pese a estar totalmente contaminado, en la parte visitada había gran cantidad de basura dentro de sus aguas, se pueden hacer acciones favorables al buen uso, como sembrar árboles en la ribera, no echar basura, purificación del agua. Pensando en crear externalidades positivas y posiblemente un malecón que sirva de tránsito para los visitantes y pobladores de la zona.

Sin embargo, existen actualmente las externalidades negativas, como son las enfermedades parasitarias producidas por la contaminación del agua, la erosión de la ribera por la falta de vegetación, el humo de las industrias aledañas, la basura existente en la cuenca y una total desidia de quienes están inmersos en esta cuenca, llámense autoridades, empresas, pobladores, comerciantes y posibles visitantes.

Para llegar a concebir las externalidades positivas y crear un centro de recreación en la zona, es necesario realizar una evaluación de los indicadores de presión, estado y respuesta – PER, dentro de los cuales hemos percibido los siguientes:

a) Indicadores de presión:
- Presencia de Asentamientos Humanos en la cuenca del río Chillón
- Actividades industriales sin política ambiental.
- Generación de residuos de las industrias y de la población.
- Agricultura si considerar la calidad del producto para el consumidor.

b) Indicadores de estado:
- La turbidez del agua del río Chillón.
- Los elementos químicos existentes en el agua.
- Los microorganismos que hay.
- La erosión de la ribera.
- La insostenibilidad del río.

c) Indicadores de respuesta:
- Sostenibilidad del río.
- Arborización.
- Pobladores.
- Enrejado.
- Ordenanzas municipales.
- Autoridades.
- Política agraria
- Política de gestión ambiental

Una vez que ya conocemos parte del PER, podríamos describir los aspectos analíticos científicos, que nos permitan convertirlo e un centro de recreación debemos:
1º Analizar la irreversibilidad del ecosistema.
2º La incertidumbre, la complejidad de los ecosistemas.
3º La singularidad, hay ecosistemas únicos como Paracas, Pacaya Samiria.

Buscar la integración de la problemática del ecosistema con el análisis de las diferentes disciplinas, que puedan servir o aplicar en la zona como parte de la conversión en un centro de recreación para todos los visitantes.

Dentro de la cuenca del río Chillón existe un ramal del gas de Camisea, ahí se puede apreciar el PK como es conocido. Hay muchos cerros dentro de la cuenca, que sirven para regular el clima de esta zona, esos cerros se han convertido en el nido de palomas silvestres que habitan en la zona, las mismas que habrían sido introducidos por los habitantes de los asentamientos humanos existentes, ya que no es una ave propia de la cuenca.

Dentro de las actividades de la cuenca del río Chillón, se pueden apreciar las siguientes.
a) Agrícolas: Hay varias parcelas o chacras donde se siembra cebolla, cebollita china, zanahoria, poro, rabanito, maíz, fresa, entre otros productos vegetales, cuyos agricultores venden los producto a intermediarios que lo distribuyen en los mercados de Lima y Callao.
b) Botadero: El relleno sanitario conocido como “La Cucaracha”, donde personas de los asentamientos humanos aledaños, hacen labores de reciclado, para vender los productos que escogen.
c) Cementerio: Donde entierran a las personas que mueren en los asentamientos humanos aledaños, dando labores p a personas para los entierros y mantenimientos de las tumbas.
d) Asentamientos Humanos: La población que vive dentro de la cuenca del río Chillón tiene necesidades prioritarias en alimentación, por lo que la implementación de pequeñas bodegas donde se expenden abarrotes, alimentos perecibles, bebidas, y otros de consumo general.
e) Planta de energía térmica: La existencia de esta planta también genera trabajo para los trabajadores aledaños, tanto directamente trabajando en ella o indirectamente, que realizan actividades para suplir necesidades de los empleados de la planta.

Dentro de la cuenca se pueden realzar muchos proyectos para disminuir la contaminación existente en la zona y convertirla en un piloto de desarrollo sostenible, para o cual es necesario inculcar la aplicación de las tres “R” de la Educación Ambiental:

“R” de REDUCIR el uso de bolsas plásticas y los deshechos.
“R” de REUSAR los productos es necesario darles mayor usos.
“R” de RECICLAR los deshechos.

Para todo esto debemos capacitar a la población de la zona, decirle que ellos tienen derecho a la vida y salud como todos los demás, que tengan como un objetivo de ellos convertir la zona en un centro piloto de desarrollo sostenible y ser ellos mismos exponentes de sus necesidades, propulsores de sus proyectos y guías de sus metas, para que de una vez este río no sea conocido como el “otro”, sino con su verdadero nombre, Chillón.